En la ciudad de Gandia, cuna de la Familia Borgia, se ha diseñado una ruta para conocer mejor el legado que esta familia dejó a la ciudad, esta ruta se puede realizar perfectamente a pie y tiene ayudas informativas mediante códigos QR. La Ruta Territorio Borgia consta de nueve puntos para visitar de forma correlativa.
Contenidos
La ruta
Punto 1. Plaza Mayor
Es en la plaza Mayor, en el centro de la ciudad junto al ayuntamiento donde empieza la ruta Territorio Borgia. La plaza Mayor de Gandia mantiene su fisonomía desde finales del siglo XIII. Ya encontramos referencia en el año 1268 de su zona porticada y el mercado de los martes.
Jaime I mandó construir la iglesia, así como también la Casa del Consejo, la Corte de Justicia, la prisión y el almudín o depósito de trigo para el abastecimiento municipal. En 1485, el cardenal Rodrigo de Borja (que llegará a ser el papa Alejandro VI), compró el ducado de Gandia para dejárselo a sus hijos en herencia.
Localización en el mapa de la Plaza Mayor de Gandia ↗
Punto 2. Colegiata de Santa María
El segundo punto es la iglesia colegiata de Santa María. Los duques reales de Gandia, Alfonso de Aragón «El Viejo» y su hijo Alfonso «el Joven», derrocaron el templo original para construir uno nuevo
La familia Borja finalizaría el templo bajo las directrices de María Enríquez, viuda del segundo duque de Gandia, cerrándolo con la «puerta de los apóstoles». Por fin, el papa Alejandro VI la elevará al rango de colegiata lo que atrajo a los artistas más importantes del momento.
Localización en el mapa de la Colegiata de Santa María ↗
Punto 3. Mirador del Serpis
El ducado de Gandia disponía de un cultivo que convertiría a los Borja en una de las familias más ricas de la época. La caña de azúcar.
El clima benigno de la zona, tener al alcance la mano de obra morisca, técnicas importadas de Sicilia como los molinos de azúcar y un sistema de explotación agricola hicieron posible que la producción de caña de azúcar fuera de las más importantes de Europa. Con la expulsión de los moriscos perdieron a parte de sus trabajadores más especializados cayendo la producción, y con ella el ducado, en una decadencia de la que nunca se recuperaría totalmente.
Localización en el mapa del Mirador del Serpis ↗
Punto 4. Hospital de Sant Marc
El hospital de Sant Marc se construyó en la segunda mitad del siglo XIII. Por supuesto se atendía a enfermos, pero también a viajeros, mendigos y toda persona que necesitara limosna o refugio, también se encargaba de los recién nacidos abandonados.
Juana de Aragón adquirió varias casas anexas para ampliarlo. Actualmente acoge el Museu Arqueològic de Gandia (MAGa) y el Museu de Santa Clara, donde se encuentran las obras que la familia Borja dio al convento.
Localización en el mapa del Hospital de Sant Marc ↗
Punto 5. Convento de Santa Clara
La familia Borja siempre apoyó al convento de Santa Clara, fundado por Violante de Aragón. Muchas de las hijas de los duques acabaron en el convento, siendo la primera de todas Isabel de Borja y poco después su propia madre, María Enríquez. Las mujeres Borja monopolizaron el cargo de abadesa durante buena parte de los siglos XVI y XVII.
Los duques siempre se mostraron muy generosos con la comunidad, impulsando diversas obras en el convento, garantizando la supervivencia material en esta clausura de estricta pobreza, y contribuyeron a incrementar el prestigio del convento a través de las obras de arte que constituyen el origen del actual Museo de Santa Clara.
Localización en el mapa del Convento de Santa Clara ↗
Punto 6. Escuelas Pías
Que las estatuas de los miembros de la familia Borja estén en esta plaza de las Escuelas Pías no es por casualidad. Juan de Borja fue un gran humanista y buen amigo de Juan Luis Vives. Su biblioteca era de las mejores de la época.
En cambio, su hijo, Francisco de Borja, decidió dejarlo todo por la religión. En este mismo lugar fundó el colegio de San Sebastián, que recibió la bula de Pablo III para convertirlo en una universidad, la primera en todo mundo regida por los Jesuitas. En 1767, se expulsó a los jesuitas de España y la universidad cerró sus puertas, que no serían reabiertas hasta décadas después por los escolapios, que recuperarían su función docente que dura hasta la actualidad. Durante la Guerra Civil y la posguerra, el edificio sirvió de cárcel política.
Localización en el mapa de las Escuelas Pías ↗
Punto 7. El torreón del pino
Francisco de Borja reforzó la seguridad de la ciudad mejorando los fosos, terraplenes y tramos deteriorados de la muralla pero la villa estaba muy desprotegida, especialmente el barrio extramuros, el lugar de los artesanos y los productores de azúcar. Por este motivo amplió la muralla y así proteger también esta zona.
Con la llegada de los nuevos cañones y armas de artillería necesitaron rebajar los perfiles de las murallas y sustituir las torres por torreones con plataformas de artillería, como este que visitamos.
Localización en el mapa del Torreón del Pino ↗
Punto 8. Convento de Sant Roc
En el siglo XVI, el duque Carlos de Borja fundó un convento franciscano sobre el foso de la vieja muralla medieval y que estaba formado por la antigua ermita de Sant Roc. Se aprovechó la vieja muralla para una de las alas del claustro. La entrada del convento se coronó con el escudo Borja-Centelles, el V duque y su esposa Magdalena Centelles.
Con la desamortización del S. XIX, el convento pasó a manos del Ayuntamiento. Se instaló en él los juzgados, la prisión y la casa de beneficencia, además se abrió una plaza que lo conectaba a la ciudad. En la actualidad es la sede del Institut Municipal d’Arxius i Biblioteques.
Localización en el mapa del Convento de Sant Roc ↗
Punto 9. El Palacio Ducal de los Borgia
Una ciudad dentro de la ciudad, un castillo urbano que erigieron los señores reales en el s. XIV, sobre la torre y las casas que habían pertenecido al rey. Desde el siglo XV los Borja lo fueron transformándo en un palacio fortificado, con ventanas y balcones a la calle, pero tambien con sus almenas y torreones defensivos, que fueron derribados por los terremotos del s. XVI.
Francisco de Borja construyó el Salón de Coronas, decorado con los símbolos de su bisabuelo Alejandro VI. A inicios del siglo XVIII, El duque Pascual Francisco Ignacio de Borja quiso celebrar la canonización de Francisco de Borja con la construcción de la Galería Dorada, en cuya iconografía se rinde tributo de homenaje su figura.
A finales del siglo XIX, y tras un prolongado abandono, la Compañía de Jesús adquirió el inmueble en pública subasta, manteniendo hasta la actualidad su propiedad.
Localización en el mapa del Palacio Ducal de Gandia ↗